miércoles, 14 de septiembre de 2016

Viaje Sorpresa con Waynabox

Hace cosa de un mes y pico decidí añadir esta a la lista de mis muchas locuras... mi madre vio anunciar lo de Waynabox y lo miramos.

Para quien no lo sepa, es una web donde pagas 150€ y te dan un vuelo de ida y vuelta a alguna ciudad de Europa y dos noches de hotel. Escoges un fin de semana, puedes escoger viernes, sábado y domingo o sábado, domingo y lunes. Te dan 10 posibles ciudades que te pueden tocar, pero hasta dos días antes no sabes el destino. Puedes eliminar de forma gratuita uno de los destinos, por si ya lo has visitado o no quieres ir, y cada destino extra que elimines tienes que pagar 5€. Además te da la opción de escoger límites de horarios, es decir, si hasta las 10h no puedes coger el avión o necesitas llegar a casa antes de las 23h... puedes marcarlo para que te cojan los billetes dentro de esos horarios.


Nuestras posibles ciudades eran:

La que eliminamos de forma gratuita fue Hungría, que no nos hacía mucha gracia, el resto nos daba igual y al final nos tocó Bruselas.

El miércoles nos llegó un correo con la ciudad que nos tocaba, los billetes de avión, la reserva del hotel... así que miramos el tiempo, hicimos las maletas y preparamos itinerario de que ver en la ciudad, como íbamos 3 días busqué una ruta de Bruselas en un día (si hacéis clic encima de la imagen podéis ver la ruta que hice).



La verdad es que tiene poco que ver Bruselas, lo más famoso son el Manneken Pis y la Jeanneke pis, las figuras de los dos hermanos meando, el Atomium, que lo dejamos para el último día y algún edificio así destacable... el primer día entre que llegamos, nos instalamos y tal... fuimos a media mañana al centro de la ciudad, vimos prácticamente todo lo importante, comimos plato típico: salchicha y bacon con puré de verduras y una salsa rara... y nos fuimos un rato a descansar un poco y por la tarde vimos la Iglesia de Notredame, hicimos unas birras, última vuelta por el centro y se acabó.

Para el segundo día habíamos contratado un viaje a Brujas con guía, ya que estuvimos mirando y costaba lo mismo el viaje ida y vuelta en tren, que el Tour con el guía, así que a las 10h fuimos para Brujas y me encantó, es una ciudad súper bonita, tiene encantó y es capaz de maravillar a cualquiera... la llaman la Venecia del Norte, esta toda rodeada por unos canales, tiene edificios preciosos y de gran importancia histórica, dimos una vuelta en bote por los canales y nos dejamos enamorar por cada rincón de la pequeña ciudad.


El último día, como ya he dicho, queríamos ir al famoso Atomium y aprovechar para ver el Parque de Europa en miniatura, pero cuando nos levantamos estaba nublado y tenía toda la pinta de llover, además teníamos que ir con las maletas arrastras o volver antes para pasar por el hotel a buscarlas y dar más vuelta... así que nos fuimos al centro al museo de la cerveza y que cerveza... aquellas suben que son un encanto, con una sola copa de las del museo pille una moña bastante graciosa. Después comimos lo típico de allí: mejillones con patatas fritas mientras escuchábamos una orquesta tocando bandas sonoras de películas Disney. Al poco ya... fuimos para el aeropuerto y de vuelta a casa.


Los vuelos fueron súper bien, de ida con Vueling y de vuelta con Ryanair, no me puedo quejar, son dos comapñias que suelo utilizar cuando escojo yo los vuelos. Nos alojamos en el Hotel Bloom, un cuatro estrellas a 20 minutos del centro andando, y a 10 minutos en transporte público, teníamos justo a 2 minutos del hotel el tranvía. A pesar de que no entraba el desayuno, teníamos una cafetera en la habitación y nos ponían capsulas de café y leche, así que nos sacaba de un apuro.
Mi opinión sobre la ciudad... no creo que vuelva nunca más de visita, porque a parte de que no es que sea súper bonita y tenga poco que ver, es muy cara: un café 4€, una lata de cerveza de 33cl en cualquier bar/restaurante no bajaba de 5€ y pico y lo más normal en precios de cerveza son 7€ y algo. El tranvía era bastante... peligroso, ya que no hay estaciones de tranvía, sino que hay en la acera como una parada de bus y para entrar o salir del tranvía había que pasar por el medio de la carretera donde estaban los coches. Además a dos calles del centro turístico tenía la sensación de estar como a las afueras en un barrio de extrarradio, como si fuese Hospitalet en Barcelona, se ve gris, un poco sucia y poco cuidada, había mucha gente pidiendo y durmiendo en la calle y por consecuencia muchos rincones de la ciudad olía a pis... ¿y qué decir del suelo? Lleno de baldosines, algunos rotos y muy incómodos para caminar y más para ir con la maleta. Aún hemos tenido suerte y hemos tenido buen tiempo, hasta hacía calor... pero nos han dicho que el 80% del tiempo llueve, solo le falta eso pa' acabar de gustarme menos.


No tengo quejas del viaje, ni de la organización de Waynabox, ha sido una experiencia muy satisfactoria y repetiré seguro.

viernes, 9 de septiembre de 2016

El origen de Purpu

Con Septiembre se acaban las vacaciones, se vuelve a la rutina y con está yo vuelvo al Blog. Llevo días con ganas de escribir algo, pero normalmente escribo cuando algo me mueve, ya sea porque me gusta mucho o porque me saca de quicio, escribo cuando necesito desahogarme porque tengo miles de pensamientos en la cabeza, pero este agosto he estado tranquilita saliendo por ahí con mis amigos, siendo feliz, descasando... y no me ha hecho falta, pero hoy me apetece explicaros la historia de mi nombre, esa que tantas veces me han preguntado, así cuando me pregunten les pasaré el link de este post y listo, la de tiempo que voy a ahorrar.

Además aprovecho y lo escribo ahora ya que, justo esta semana, hace 13 años que me pusieron el nombre de Purpu, el 5 de Septiembre de 2003. Os explicaré las dos versiones, la oficial y la real.

Empecemos por la versión oficial, es decir, la que conoce todo el mundo, la que circula por mis círculos de amistades, un día alguien la explicó y ha ido pasando generación tras generación. Es corta y concisa: “Un día se me calló un pote de purpurina en la cabeza y acabe llena de ella de cabeza a píes”




Y aquí viene la versión real: fui al concierto de Beth de operación triunfo en el pueblo de mis abuelos, de hecho ella es de allí, y como de costumbre yo fui a hacer cola bien temprano para poder conseguir primera fila. A media mañana me pinté la cara, me puse I (corazón) Beth y puse purpurina en el corazón ¿y qué pasó? Que me quedó restos en las manos y todo lo que tocaba de i cuerpo quedaba impregnado con ella, además llevaba una camiseta de purpurina que también iba soltándola y llenándome más... Yo para variar la estaba liando todo el rato, era el alma de la cola, pa'rriba, pa'bajo, cantando, dinamizando juegos, hablando con unos y otros, organizando... y como sólo me conocían los del barrio, los que no sabían quien era empezaron a llamarme Purpu y a mis amigos del barrio les gustó y me empezaron a llamar así también, además, me quedé 15 dias más en el pueblo y los que me veían por allí me decían cosas como "¿Tu eres Purpu, no?" o "Esa Purpuu!!" y como me hacía gracia me lo puse de nick en el Messenger para que todos los que había agregado del concierto supiesen quien era y ya todo el mundo empezó a llamarme así, a partir de entonces cada vez que iba a una firma, concierto o algo así me presentaba como Purpu y a día de hoy... ya es mi presentación oficial para todo.